Miopía Magna

La miopía magna o patológica no es solo una graduación alta de miopía, sino una afección ocular que puede aumentar el riesgo de enfermedades como desprendimiento de retina, glaucoma o degeneración macular.

miopia magna

Afecta aproximadamente al 2% de la población mundial.

Puede aumentar el riesgo de desprendimiento de retina hasta 10 veces más que en personas sin miopía.

La monitorización oftalmológica es clave para evitar complicaciones.

231207 46
fondo ojo

¿Qué es la Miopía Magna?

La miopía magna es un tipo de miopía alta que suele superar las -6.00 dioptrías y está asociada con un alargamiento excesivo del ojo. Este crecimiento anómalo puede provocar alteraciones en la retina, el nervio óptico y otras estructuras oculares, afectando la calidad de la visión a largo plazo.

Diferencia entre Miopía Común y Miopía Magna:

🔹 Miopía común: Se debe a un ligero alargamiento del ojo y suele estabilizarse en la adultez.
🔹 Miopía magna: El ojo crece en exceso, aumentando el riesgo de enfermedades oculares y pérdida visual.

Más allá de la dificultad para ver de lejos

✅ Visión borrosa a larga distancia
✅ Necesidad frecuente de cambiar la graduación
✅ Mayor sensibilidad a la luz
✅ Alteraciones en la visión central o periférica
✅ Destellos de luz o moscas volantes
✅ Riesgo elevado de desprendimiento de retina o maculopatía miópica

Si notas estos síntomas o tu graduación aumenta constantemente, es fundamental realizar revisiones oftalmológicas periódicas.

¿Por qué algunas personas desarrollan miopía magna?

🔹 Factores genéticos: Si uno o ambos padres tienen miopía alta, el riesgo aumenta.
🔹 Factores ambientales: Exposición reducida a la luz natural y el uso excesivo de pantallas pueden influir.
🔹 Crecimiento ocular anormal: Un alargamiento excesivo del ojo provoca la alteración de la retina y el nervio óptico.

Control y prevención para evitar complicaciones oculares

Si bien no existe una cura definitiva para la miopía magna, hay tratamientos que ayudan a frenar su progresión y reducir los riesgos asociados.

Opciones de Tratamiento:

🔹 Lentes de contacto y gafas personalizadas: Corrigen la visión y protegen los ojos de la fatiga visual.
🔹 Cirugía láser (PRK o Femtolasik): Indicada en algunos casos para reducir la graduación.
🔹 Lentes intraoculares fáquicas (ICL): Una alternativa para pacientes con córneas delgadas o graduaciones muy altas.
🔹 Monitorización oftalmológica periódica: Fundamental para detectar a tiempo posibles complicaciones como el desprendimiento de retina.

Nuestra clínica

231207 11

Consulta de oftalmología

Ofrece un entorno acogedor y profesional para diagnósticos precisos y discusiones detalladas sobre tratamientos personalizados.

231207 9

Sala de exploración

Equipada con equipos de última generación, esta área permite realizar una variedad de pruebas y exámenes oftalmológicos exhaustivos. 

231207 2

Sala de espera

Con una decoración cálida y acogedora, proporcionamos un ambiente relajante donde los pacientes pueden esperar su turno con serenidad.

Resuelve tus dudas

Resolvemos las dudas más comunes sobre síntomas y tratamiento de la miopia magna. Encuentra aquí toda la información que necesitas para recuperar tu visión con confianza.

En algunos casos, sí, pero no en todos. La cirugía láser (PRK o Femtolasik) puede reducir la graduación, pero no corrige el alargamiento del ojo ni elimina el riesgo de complicaciones.

Si no se controla, puede aumentar el riesgo de enfermedades oculares graves como desprendimiento de retina, maculopatía miópica o glaucoma, que pueden afectar severamente la visión.

Sí, pero siempre bajo supervisión oftalmológica, ya que las lentes de contacto pueden aumentar el riesgo de infecciones o intolerancia ocular en algunos casos.

Sí, especialmente si su miopía sigue aumentando rápidamente. Por eso, es fundamental un control oftalmológico desde una edad temprana.

Evita el uso excesivo de pantallas, pasa más tiempo al aire libre, sigue una alimentación rica en antioxidantes y realiza revisiones oftalmológicas regulares.

Se recomienda al menos una revisión anual o cada seis meses si existen factores de riesgo adicionales.