¿Te han dicho «NO» a la Cirugía Láser? Por qué no todos son candidatos ✨

Para millones de personas con miopía, la cirugía refractiva láser (como LASIK o PRK) representa el sueño de decir «adiós a las gafas». Sin embargo, un número significativo de pacientes acude a nuestra consulta frustrado tras haber recibido un «no eres apto» en otro centro. ¿Por qué ocurre esto? ¿Significa que debes resignarte a usar lentillas para siempre?

En absoluto. En Clínica Ramírez & Gálvez, creemos en la honestidad diagnóstica. La cirugía láser es una herramienta maravillosa, pero no es universal. Hoy, el Dr. Javier Ramírez te explica por qué no todos los ojos son candidatos para el láser y cuál es la solución, a menudo superior, que la oftalmología moderna ofrece.

Entendiendo la Cirugía Láser: Es una Cirugía de Córnea

Para entender por qué «no eres apto», lo primero es saber qué hace el láser. Esta cirugía funciona moldeando la córnea (la «ventana» transparente del ojo) para cambiar la forma en que enfoca la luz. El láser, literalmente, pule y retira una cantidad microscópica de tejido corneal para corregir las dioptrías.

Por lo tanto, el pilar fundamental para esta cirugía es tener una córnea sana, estable y con un grosor suficiente.

Los 3 Motivos Principales para un «NO» al Láser ❌

Si un oftalmólogo responsable te dice que no eres candidato, suele ser por una de estas tres razones de seguridad:

  1. Córnea Fina: Es la causa más común. La cirugía láser consume tejido. Si tu córnea es demasiado delgada de nacimiento, quitar el tejido necesario para corregir tu miopía la dejaría peligrosamente débil, pudiendo causar problemas graves a largo plazo.
  2. Graduación Muy Alta (Alta Miopía): Está directamente relacionado con lo anterior. Corregir -8 o -10 dioptrías requiere eliminar mucho más tejido corneal que corregir -2. Si tienes muchas dioptrías, es muy probable que la cirugía láser no sea segura para ti, aunque tu córnea no sea especialmente fina.
  3. Patologías Oculares Ocultas: Un estudio preoperatorio exhaustivo puede revelar problemas que contraindican el láser, como un queratocono incipiente (una deformación de la córnea), ojo seco severo o una graduación que todavía no es estable.

El «Plan B» que Supera al Plan A: Las Lentes Intraoculares (ICL) 💡

Recibir un «no» para el láser no es el final del camino. De hecho, para muchos pacientes, es el comienzo de una solución aún mejor: las lentes intraoculares fáquicas (ICL).

  • ¿Qué son? Son unas lentes microscópicas, fabricadas con un material biocompatible, que se implantan dentro del ojo, entre el iris y el cristalino (sin sustituir a este último). Actúan como una lentilla permanente, pero invisible.
  • ¿Por qué son la mejor alternativa?
    • No se toca la córnea: No se elimina tejido, por lo que es la solución perfecta para córneas finas.
    • Corrigen altas graduaciones: Son capaces de corregir de forma segura y precisa miopías muy altas (hasta -18 o más).
    • Es reversible: Si algún día fuera necesario, la lente se puede retirar.
    • Calidad visual: A menudo, la calidad de visión que proporcionan es superior a la del láser en casos de alta miopía.

Un «No» a Tiempo es un Signo de Profesionalidad 🌟

Que un cirujano te diga «no» a la cirugía láser no es un fracaso, es un acto de máxima responsabilidad médica. Demuestra que prioriza tu seguridad a largo plazo por encima de todo.

La oftalmología moderna tiene soluciones increíbles para casi todos los casos. Un «no» al láser es, muy probablemente, un «sí» rotundo a las lentes ICL. Si quieres saber cuál es la mejor, más segura y más eficaz solución para tus ojos, pide tu cita. En Clínica Ramírez & Gálvez realizaremos un estudio completo para darte una respuesta honesta.

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